Después de un largo tiempo sin poner un pie en la incomparable Ciudad de México, tuve la oportunidad de volver por un par de días, esta vez con la intención de visitar lugares que no había podido conocer en otras ocasiones y claro, probar cosas nuevas.
En cuento tuve mis fechas confirmadas contacté a un amigo local para pedirle hospedaje en su casa, una vez ahí supe que vivía en Iztapalapa, delegación súper conocida gracias al “De Iztapalapa para el mundo” de Los Ángeles Azules y por su mala fama, por fortuna no presencié ni viví ni un solo acto delictivo durante mi estadía de 4 noches y 5 días, lo único en lo que pensaba era en la canción de “17 años” cada vez que veía o escuchaba la palabra: Iztapalapa.
A pesar de que mi prioridad era conocer lugares nuevos, no podía dejar de visitar sitios que me encantan, iconos de la Ciudad de México como el Centro Histórico, el Monumento a la Revolución o el Castillo de Chapultepec, lo cual me sirvió para poder actualizar la entrada de “Estos 8 lugares no pueden faltar en tu visita a CDMX” y mantenernos al día. Además me volví a aventar el circuito Centro – Polanco de Capital Bus.
Tenía algunos lugares en mente, sin embargo siempre estoy abierto a recomendaciones, por lo que lancé una pregunta en nuestro Instagram donde recibimos muchas sugerencias, estas son algunas de ellas:
La Casa Azul, Museo Frida Kahlo. Se ubica en uno de los barrios más coloridos de la Ciudad de México; Coyoacán. Este lugar es donde nació, vivió y murió Frida Kahlo, está repleto de historias, obras y objetos personales de esta famosa pintora.
Este museo es súper concurrido, por lo que comprar tus boletos en línea es una grandiosa idea, se cuenta con una línea para quienes ya tienen boleto y otra para los que no, así que ten paciencia. Cada entrada tiene un costo de $107 pesos para nacionales y se puede adquirir un permiso para tomar fotografías sin flash (nada de videos) por sólo $30 pesos.
Además te incluye la entrada al Museo Diego Rivera Anahuacalli, ahí mismo puedes pedir información de cómo transportarte y te entregan un flyer explicándote como llegar en autobús público. *Los sábados y domingos se ofrece el Fridabus, un camión que te lleva a ambos museos.
Este museo nos muestra la pasión de Diego Rivera por la cultura prehispánica, cuenta con una arquitectura impresionante, así como colecciones personales y obras del muralista. Aquí también puedes adquirir un permiso para fotografías por $30 pesos.
Ciudad Universitaria, popularmente conocida como CU es el enorme campus de la Universidad Autónoma de México (UNAM), con emblemáticos edificios como la Biblioteca Central y la Rectoría. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 2007
Para los amantes del cine de arte está la Cineteca Nacional, un recinto lleno de historia, y para mi suerte pude ir el día que cumplía 45 años. Además estaban proyectando la multinominada película de ROMA.
Aproveché para conocer Los Pinos, espacio que servía como residencia del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos y que abrió sus puertas al público a partir del 1 de Diciembre del 2018.
Xochimilco era la primera opción en la lista, y curiosamente fue la última atracción que visité, pues fue el día en coincidían los horarios de mi amigo y su hermana, llegamos casi al atardecer, por lo que fueron pocos los minutos de luz de día que tuve para apreciar las hermosas trajineras y un poco de las chinampas.
Inmediatamente comenzamos a preguntar precios, $500 pesos la hora es el precio estándar en un paseo privado, aprovechamos para comprar todo lo que llevaríamos en nuestro viaje, unas clásicas micheladas y antojitos mexicanos como quesadillas, tacos y tlayudas.
A pesar de haber tomado el recorrido de noche se podía sentir y vivir el encanto de Xochimilco, la alegría que emanaba de cada trajinera sin importar el estilo musical que tuvieran o el número de personas en la embarcación.
Gracias a esta experiencia tengo por seguro que la próxima vez que vuelva a la Ciudad de México, regresaré a Xochimilco pero esta vez de día para conocer sus dos caras.
Gran parte de mis desplazamientos a puntos turísticos de interés fue en Uber, el cual usé prácticamente todos los días, sin embargo, gracias a mi amigo chilango pude aventurarme en otros medios de transporte que por lo general no suelo usar; el metrobús y el metro.
Para quienes vienen de ciudades grandes tal vez estos medios sean muy comunes, para mí, que solo he vivido en lugares pequeños, donde estos transportes no existen, todo me resultaba sorprendente, en cada paso que daba me sentía en uno de esos chistes sobre los provincianos, se identificaba con ellos y cada vez que podía sacaba mi celular para documentar el momento, siempre con cautela, sobre todo después de escuchar sobre los “bolseos”.
Tanto el metrobús como el metro me parecieron muy económicos, en cierta parte son fáciles de usar, solo basta con ver el mapa o estar atento a las paradas, y muy rápidos, mucho mejor que quedarse atrapado en el tráfico de la ciudad, eso sí, nada cómodos, ya que casi siempre se viaja apretado y los empujones nunca faltan al entrar o salir.
También nos lanzamos a los tianguis y mercados, que están repletos del folclore mexicano y llenos de sabor, comí mucho en la calle, disfruté cada bocado de los tacos de suaperro, la longaniza y todo lo que probé. Sin duda un gran viaje.
¿Qué es lo que más disfrutas de la Ciudad de México?
¡Vivir allá! Y aunque disfruto la tranquilidad de provincia, me aburro muchísimo fuera de mi querida CDMX, ¡lo tiene todo!, bien dicen que uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, de verdad extraño mucho mi ciudad, pero ya pronto vuelvo y estoy muy feliz por eso. La CDMX simplemente es increíble ?